Las zanahorias están rodeadas de historias interesantes. Por ejemplo, el que ponía la voz de Bugs Bunny
odiaba las zanahorias, pero la única forma de conseguir el efecto de
sonido correcto cuando el personaje le hincaba el diente a una, era
morderla. Luego, claro, el actor escupía la zanahoria con una mueca de
asco.
También se cree que las zanahorias son afrodisíacas o sirven para mejorar la vista.
Pero quizá la idea más chocante acerca de las zanahorias es que su característico color naranja fue adoptado hace relativamente poco.
La prueba más antigua que se conoce del uso de zanahorias por parte
de humanos, en Afganistán, data del año 3.000 a. C. Aquellas zanahorias
eran de color púrpura por fuera y amarillas por dentro.
Más tarde, cuando los comerciantes árabes extendieron la semilla de
zanahoria por Asia, África y Arabia, surgieron variedades con diferentes
tonos de púrpura, blanco, amarillo, verdes e incluso negro. ¿Os
imagináis comiendo una zanahoria negra?
La primera zanahoria naranja vino mucho más tarde. Se cultivó en la Holanda del siglo XVI,
y fue el resultado de un cruce deliberado para que coincidiese el color
del vegetal con el de la casa real holandesa de Orange.
Así que hoy Bugs Bunny come zanahorias naranjas debido al patriotismo exacerbado de Holanda.
En el siglo XVI, los holandeses eran los
principales productores europeos de zanahorias, y todas las variedades
modernas descienden de sus cuatro tipos de color naranja: la Early Half
Long, la Late Half Long, la Scarlet y la Long Orange.
Actualmente se ha puesto de moda volver a cultivar zanahorias de
colores. Ya hay tiendas con zanahorias blancas, amarillas, roja oscura y
púrpura, para hacer las ensaladas más divertidas. Aunque para añadir
diversión, nada como el invento de los islandeses: en 1997 desarrollaron
una zanahoria con sabor a chocolate dentro del programa Wacky Veg (Verduras chifladas), dirigido a la población infantil.
Lamentablemente se retiró a los 8 meses de su presentación. Mi gozo en un pozo.
Por cierto, lo de que las zanahorias nos ayudan a mejorar nuestra visión en la oscuridad es un mito.
La carencia de vitamina A puede provocar ceguera nocturna, pero la
zanahoria tampoco es que tenga mucha vitamina A: antes habría que
consumir albaricoques, arándanos, espinacas y otras verduras de hoja
verde oscuro.
Pero por mucho que comáis de todo esto, no acabaréis teniendo una
visión nocturna de gato; si acaso, después de mucha zanahoria,
conseguiréis que vuestra piel luzca naranja (por ello se recomienda para
mejorar el bronceado).
El mito proviene de un secreto militar. Durante la Segunda Guerra Mundial, el capitán John Cunningham dirigía su escuadrón 604 por la noche y empleaban recién desarrollado sistema de radar por aire. Como el dispositivo era top secret,
el Gobierno británico difundió el rumor de que Cunningham era capaz de
ver en la oscuridad y acabó ganándose el apodo de “Ojos de gato
Cunningham”.
Los alemanes probablemente no se tragaran el bulo, pero sin duda ha
contribuido para que toda una generación de niños ingleses comiesen la
única hortaliza disponible durante la guerra.
Y es que ya lo decía en cuentista Anton Chejov: “me
preguntan qué es la vida. Es como si me preguntaran qué es una
zanahoria. Una zanahoria es una zanahoria, y no sabemos nada más.”
Pues eso.
Vía:http://www.xatakaciencia.com/quimica/las-zanahorias-son-de-color-naranja-gracias-al-patriotismo-de-holanda